Día 10: De Kuopio a Akaslompolo

Siento no haber escrito antes pero es que he estado sin internet.
Nos levantamos a las 6 y media, aunque Vanessa ya estaba despierta desde las 4 y media que fué cuando empezó a llover, mientras yo dormía como un niño. Luego como todas las mañanas, ducha, ordenar las maletas y lo más deseado el desayuno buffet. Estabamos deseando llegar a los paises nórdicos para degustar esos desayunos que tan buén recuerdo nos dejaron en la anterior visita. Yo pues me atrevo con las salchichas y las albóndigas pero Vane solo un bocata y cereales.
Después de desayunar, pagar el hotel que la verdad estaba muy bien y a repostar. Por cierto ya cuando nos montamos en la moto la cosa no se prometía muy feliz pues no paraba de llover. En Kuopio la gasolina a 1.61 el litro que no está mal para ser Finlandia pero después de ver que en Letonia está a 0,96 pues hombre te da coraje pagar esos precios.
Asi que nos quedan unos 500 km y con agua, así que a ponernos las pilas. Durante unos 50 km circulamos por la carretera que va a Mikkeli hasta llegar a un cruce que lleva a Jyvaskyla o a Oulu. Nosotros para ir a Akaslompolo cogemos dirección Oulu. Lo peor de todo es que la intensidad de la lluvia aumenta y después de 4 horas montado en la moto al final empiezas a estar calado.Tengo los pies mojados y esa sensación en los pies es insoportable pues notas como se te duermen los pies, además los camiones de Escandinavia no ayudan, son grandes trailers que cuando pasan por tu lado te ponen chorreando.

No deja de llover ni de hacer viento, menos mal que modificamos las maletas para que no se mojase nada, además la temperatura pasa de unos 16 grados a unos 7,5 y eso no ayuda. Cuando ya no aguantamos más decidimos parar a unos 30 km de Oulu. Tras tomar un café muy caliente y un dulce aprovechamos para abrigarnos un poco más pues el abrigo nunca viene mal.
Después de reemprender la marcha parece que quiere dejar de llover pero creo que solo en mi cabeza pues la realidad es otra. Finálmente paso por Oulu y después cojo la carretera que me llevará a Kemi hasta que transcurridos unos 380 km y como soy previsor me paro a echar gasolina pues cada vez más escasean las gasolineras. Y vaya la gasolinera es automática y no acepta mi tarjeta asi que me acerco a un centro comercial a sacar dinero, pues la verdad es que no me molaría quedarme sin gasolina y menos un día como hoy.

Después de repostar 20 euros continuo por la carretera de Kemi hacia Akaslompolo cuando por fín parece que deja de llover y Vanessa por fín puede sacar la cámara de fotos y liarse a hacer fotos que estaba deseando sacar la cámara del Top Case. Empezamos a disfrutar del paisaje la verdad es que es maravilloso yo esta parte de Finlandia no la conocía y la verda es que no defrauda todo lo contrario la verdad es que me siento un tío importante en mi BMW viendo como la gente ve la moto y nos miran surcando las carreteras y con ese escape Akrapovic que no deja a nadie indiferente. Pero bueno sin darnos cuenta llegamos al círculo Polar Ártico así que toca parar a hacernos una foto y a hacer algo de shoping je je je.

Cuando nos damos cuenta son las 3 de la tarde y tenemos que seguir así que seguimos a un buen ritmo mientras disfrutamos felices del poder viajar en moto y por esta tierra que tanto nos gusta y así pasan los kilómetros disfrutando cada vez más la verdad es que quitando las trompas de agua de primera hora de la mañana está siendo maravilloso. Vamos bordeando la frontera de Suecia en todo momento hasta que por fín vemos un desvio que pone a Akaslompo 30 km y nada que allí nos dirigimos. La carretera es indescriptible, voy a 60 km por hora atontado con los paisajes mientras Vanessa lleva la cámara echando humo.

Finálmente llegamos a Akaslompolo, el pueblo es muy pequeño y muy desperdigado además tiene una pista de esquí a 2 km vamos que es un pueblo que en invierno está a tope, vamos a ver una tienda de souvenirs de laponia y nos hacemos esta foto je je je.

Nos dirigimos al hotel y el GPS nos manda a la derecha en un cruce así que nos dirigimos por una carretera estrecha hasta que llegamos a una casa que parece la recepción, tras leer un cartel nos dirigimos al bar y allí la señora nos da las llaves de un apartamento con sauna que para nosotros y en plena naturaleza nos pareció mejor que la mejor suite del Hilton.

Las maletas de la moto parecen pozos pues las maletas laterales tienen más de 3 cm de agua, la verdad es que para lo que costarn las maletas de BMW son una mierda, después del viaje las dejaré de usar y haber si me paso por 2T Moto a ver que me recomienda David.

Tras la ducha y el repaso al material nos damos una vuelta por los alrededores, no he podido comprar en el super pues cierran a las 6 así que a comer al restaurante algo de comida típica. La verdad es que los paisajes son una maravilla.

Después de una hora dando vueltas por los senderos de la zona cargado con el trípode buscando buenas fotos, nos vamos a comer algo al hotel.
Comimos comida típica de Laponia y bebí una cerveza buenísima que se llama Lapin Kulta, al final me acosté media contento y deseando soñar con la llegada a Cabo Norte.

Fernando Fernández
"Cántabro"